lunes, 3 de marzo de 2014

Libro de Juan (El infierno de Mónica) PGN. 204: en ejacucion


Moriría por salvar, por ayudar a quien fuera… de verdad he sufrido mucho vuestra ausencia. Eres un cielo, la única amiga de verdad, que tengo… ¿quieres que te diga la verdad. Tu también… tu y westlie sois mis únicas amigas.

Había transcurrido una semana desde el rescate. Había sido una semana intensa gran parte del tiempo había transcurrido en la sala de interrogatorios en la oficina central del FBI. Si interminables sesiones de interrogatorio. Preguntas, y mas preguntas todas naturalmente referentes -¿Dónde consiguió todo este material? -¿Donde permaneció aquellos tres días? y sobre un sinfín de temas, algunos incluso rayando el absurdo. Intentando todo el tiempo que confesara algo que para mi era inconfesable, sencillamente porque no sabia de donde procedía ese conocimiento supuestamente adquirido durante ese periodo.

Por fin se fue cumpliendo el proceso, la memoria fue cayendo como el telón de un teatro… después de la función, evaporándose como el humo de un cigarrillo en un dia de viento.  Los altos jefes llegaron a la conclusión que todo aquel material, los sistemas construidos eran inservibles sin la memoria… todo se había desestructurado… no habían conseguido retener absolutamente nada en el banco de datos del sistema central… por eso, aquel interminable interrogatorio.

Por fin entendieron que yo no mentía que era inútil. Mi abogado y la agencia llegaron a cumplir lo que era irremisible. Todo  aquel materia,l los sistemas diseñados, junto con todos los elementos consecuencia de aquel proyecto debían ser destruidos ante la presencia de ambas partes.


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