PGN 2
German tomó el
desvío, entró en la carretera. La lluvia iba en aumento… -bien tendré que
armarme de paciencia, “lo más importante es la seguridad” -peso.
La carretera iba
desierta de vez en cuando lo rebasaba un coche. El adelantaba al algún camión.
Solo había una salida una zona residencial llamada Mojón blanco, luego estaba
la de su casa y por último la salida del pueblo de Rocas negras. Estaba
empezando a oscurecer encendió las luces. De pronto vio dos siluetas que
caminaban por el arcén. Que le pasa a la gente ¿Cómo se les ocurre salir con
este tiempo? Aminoró la marcha a una velocidad de seguridad… pensando que se girarían
y levantarían el brazo haciendo señales de auto stop, pero no fue asi. Redujo a
primera les adelanto ellos avanzaban como si no viesen a nadie.
Bajó del coche,
corrió a su encuentro… -Oiga ¿porque van por la carretera con este tiempo?
-preguntó preocupado ante la indiferencia de la mujer y el llanto del chico. Se
plantó delante de ella obligándole a detenerse… -por favor, deténgase. Entren
en el coche, les llevo a donde usted
diga -Ella le miro un instante –al fin dijo, eso no es posible. Por favor
entren en el coche, dígame que le ocurre y si puedo hacer algo... quiero
ayudarles.
Ella dijo no pasa
nada vamos a Rocas negras… -En aquel instante el chico gritó… Mama dile la
verdad. Papa te ha dado una paliza… Él ha pegado a mi madre y cuando se ha ido
nos hemos escapado. La madre dio un tirón al chico en el brazo -diciendo Carlos
cierra el pico. –Nó, regañe al niño los hijos son sinceros, geniales, somos los
padres los que nos complicamos la vida… a veces por tonterías. Por favor
acomódense en el asiento, deme e esa bolsa la dejare aquí donde no les estorbe.