viernes, 3 de julio de 2015

2 Paginas de mi libro (El infierno de Mónica)



Dos páginas de mi libro en ejecución: (El infierno de Mónica)

En esta escena Diego y Pilar eran invisibles ante cualquier ser humano,
debido a un proceso de bio regeneración que estaba próximo a producirse
en ellos.................................................

Me separe un poco de la cama, no quería correr ningún riesgo… sobre todo viniendo de aquella joven, que parecía tremendamente excitada. Y también porque… a no ser que Pilar lo decidiera no quería intervenir hasta que no hubiese terminado, el feliz acto del amor entre ellos. Mire a Pilar y en el acto entendí que ella pensaba de la misma forma que yo. Me sentí preocupado cuando la vi avanzar con la mirada fija en la feliz pareja.

La joven  seguía con el mini sujetador; le reprochó a él, que aún no hubiera terminado ni de quitarse la camisa… comprendí que durante la comida habían abusado un poco del vino que observe encima de la mesa…. –¡¡Vamos!! -dijo ella con un tono de apremio en su voz mientras se bajaba el pantalón… el como respuesta balbuceo algo que no entendí. Me lleve un sobre salto cuando sentí que algo me rozaba sobre una la pierna…. -Por dios santo Pilar –susurre.  Acaso pretendes que me dé un infarto. Podías haber…. -Calla, observa y no te muevas… -En aquel instante él se arrancó los pantalones… -dios mio, Diego –susurró Pilar rozándome de forma leve con la punta de la nariz en la oreja -este tio… comparado con tus… -en aquel instante la joven  volvió a reprochar algo… ¡¡Vamos hombre…!! -ah!, si -respondió el con un hilo de voz… Emm, si ahora a quitarle poquito a poco las bragas a mi pichoncita para que crezca la excitación en ella hasta límites insospechados.

Tendí el brazo sobre el hombro de pilar y la atraje hacia mí con energía, porque algo hacía rato se había manifestado en mí, que ante la visión de aquella pasión tan desenfrenada por los jóvenes… ya era imposible contenerse –¿pero qué es lo que haces? -dijo pilar con voz de fingido reproche…. Cuando sintió que mi mano ascendía por su entre pierna –¡ven! -exclamé… vamos rápido ahí, en el rincón…. -Los jóvenes me sorprendieron.


Seguían y seguían, los gemidos de placer de ella y los de pilar… aquello, era para volverse loco de placer… nosotros acabamos, pero ellos aun seguían… -ese chico, ¡como aguanta! –dijo pilar; y parecía un don nadie. –el hábito no hace al monje preciosa –respondí mientras me subía los pantalones, y sintiendo que las piernas me flaqueaban.

Nuestro plan para expulsar a los habitantes del refugio había dado resultado. Una vez la pareja término se quedaron exhaustos en la cama. Pilar se acercó y como si tratara que el recuperara el conocimiento golpeo con el dorso las manos al joven. Este pensando que era su chica que deseaba que la complaciera de nuevo, se dio la vuelta en la cama quedando de cara a la pared. Ahora fue a ella a la que repitió el mismo gesto que a el. Ella alargo el brazo golpeando a pilar en la cadera… pero qué demonios es esto se reincorporo, y al ver que su amante permanecía profundamente dormido –dijo, no intentes disimular, al ver que el no respondía le agarro por el brazo y lo arrastro con violencia hasta el filo de la cama. Pero! –¿Qué te pasa? ¿porque me golpeas de esa manera? –yo… no intentes hacerte el gracioso y dejame dormir. Ahora fui yo el que también con el dorso de la mano golpee a ella en la frente, quedo inmóvil un instante. Miro a el, segura que el golpe no le había llegado de allí –dijo con voz temblorosa. Vamos…. Vamos, salgamos; maldita sea aquí está pasando algo –pero ¿qué dices -respondió el. De nuevo golpee esta vez a el en el hombro, se que do petrificado…. Cuando reacciono con la mirada desenfocada miro al suelo  después al techo, por ultimo reparo en ella que precipitadamente se ponía la ropa. Se colocó los pantalones y  los dos se precipitaron hacia la salida del compartimento.