PGN.
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Moran
me aconsejo que no contratara a el Trainer del caserío pues la tarde se había
cerrado, la temperatura había descendido considerablemente… y si no era un caso
de vida o muerte era mejor no arriesgarse… -eres nuestro invitado esta noche -dijo.
Mañana con la luz del dia será otra cosa, ahora vamos a cenar, ha descansar un
rato… háblame de España, mi nuera y mi hijo…
Desperté bañado por un mar de sudor, fui hacia la ventana pase la mano por el cristal
para aclara la visión del exterior, todo oscuro excepto a lo lejos llegaba e el dedil resplandor de una farola. Había nevado porque no se veía ni rastro de
huellas… en aquel instante se produjeron unas vibraciones en el exterior, vi
descender una leve catarata de nieve a través del cristal de la ventana, todo empezó
a dar vueltas volví a la cama. Después de un rato todo dejo de moverse en mi
cabeza, pero aquella sensación, aquella ansiedad seguía allí torturándome. Algo
estaba pasando… de pronto sentí la necesidad de advertir a moran y a su familia
de algo, pero no sabia de que y aquello suponía un problema me tomarían por un
chiflado… les pondría en un aprieto se arrepentirían de haberme aceptado como
huésped en su casa –Dios mio ¿Qué hago? –pensé.
Que
ocurre Johannes ¿no te encuentras bien? Estas sudando haces mala cara. –no es
nada… ya lo he experimentado otras veces. Moran tenemos que… tenemos que
abandonar la casa, aquí esta sucediendo… -pero! ¿de que estas ablando? Vamos
amigo cálmate ahora le digo a ella que prepare algo –Moran tenemos que salir de
la casa, pero eso… -¿que es lo que pasa aquí?. El dice que debemos abandonar la
casa, que presiente algo… -Guauuuuuu!! ....... -Que asido eso!
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