domingo, 25 de julio de 2010

Libro de Juan: El vajero de los Mundos PGN. 260


PGN. 260


Dios mío, jovencita tus palabras… ¿eso también lo has oído de-
cir a mi hijo? -Todo lo he escuchado de Onni, menos lo de tu
Corazón y tu rostro siempre triste., No sé cómo llamarte, Li-
berto o padre de Onni, con tío Jorge me resulta más fácil, des-
Desde la primera vez le llamo tío Jorge pero ese nombre tuyo
Lo pronuncio muy mal, ya sabes la erre. Te llamare como te
llama Elenita, si, me gusta más, también porque eres el papa
de Onni y yo le considero para mí lo que tu eres para el ¿quie-
res que te llame abuelo? Joven Akka sabes llegar al corazón,
no aparentas la edad que tienes, piensas como una persona
de mas años i experiencia –Bueno yo siempre he sido asi, he
sufrido mucho aun sufro, ya sabes, cuando se presentas esas
crisis, aunque ahora no son tan agudas como antes, pero cuan
do llegan, mi mente se convierte, en un verdadero infierno. So-
el…el es el único que llega hasta allí, el único ser que ha llega-
do hasta allí, hasta el fondo de mi soledad, el que a aplacado
la furia de mis demonios. Es por eso por lo que te digo que lo-
considero lo mismo que el a ti. -Cielo santo joven Akka… eres un
ser maravilloso, te pareces a el en muchos aspectos, Joven Akka
Llámame como desees.
Bien Papa estamos en la sala de embarque, ¿lo llevas todo? Si
Note preocupes ¿El billete? Si, si aquí esta, te pareces a tu ma-
dre jejejeje. Cuídalas hijo ¿Cómo? Cuida a Pirkko, ha Giovanna,
a Elenita, a tu hermana y a ese ser tan extraño y encantador
Me refiero a la joven Akka. Oh Papa por Dios, te estas punien-
Do sentimental. Onni esa criatura es especial, tiene tu forma de
Ser, si no fuera por que procede de donde procede pondría la
mano en el fuego, seguro de que es hija tuya. Vamos, viejo
Sentimental, cuida de Mama y alégrate, no me gusta verte así
eres mi viejo preferido, te quiero mucho.

jueves, 15 de julio de 2010

Libro de Juan ( El viajero de los Mundos pgn. 255 )


Pues recuéstate aquí junto a Giovanna, las dos aquí juntas.
En marcha destino el monasterio, esta noche dormiremos
en cama, bien blandita el lecho de hojas, al final he acabado
hecha polvo.
Hola a todos. Akka!! …Padrino!!! -¿Cómo has pasado la noche
Allí en la montaña? Muy bien, es una sensación muy agrada-
Ble, allí bajo las estrellas, escuchando como se expresan las
criaturas de la noche ¿criaturas de la noche? ¿ha que te refie-
res? A todos los seres vivos, a los que tienen su hábitat allí.
Onni me ha explicado y me ha enseñado a diferenciar cuales
las voces e algunos incluso que querían expresar en aquel-
instante. Ha sí.. ¿y qué voz ha sido la que más te a inpresio-
nado? Por supuesto el canto del ruiseñor, y también el grillo
zapatero y el croar de las ranas allí en el rio, Es fantástico.
-¿querrás venir mañana por la noche a cazar conejos. Debe
ser complicado andar por los senderos. No solo iremos con
el coche por el camino, despacito, suelen acercarse siempre
y entonces se deslumbran con la luz, allí se quedan quietos.
Uno se baja del coche les golpea y ya esta –Oh!! Padrino, pe
Ro eso es cruel yo no se si podría hacerlo, son animalitos
Pequeños he inocentes, no pueden defenderse. –bueno ahí-
Jada es ley de supervivencia, si padrino pero tenemos otras
cosas que comer. –marco creo que no tedas cuenta que
ella… no. –si tío Jorge estoy de acuerdo con la caza pero yo
no…nunca mataría ha un animal tan pequeño y tan indefen-
so. Lo siento ahijada creo que te he amargado el momento,
por favor discúlpame….
Hola. –hola joven Akka ¿Qué haces levantada tan temprano
No tengo sueño he escuchado un ruido, me he asomado ha
La ventana y te he visto salir.

jueves, 8 de julio de 2010

domingo, 4 de julio de 2010

Libro de Juan: El vajero de los Mundos PGN. 252



PGN. 252

Si nó, se hubiese producido una espantada. Dios mío, de-
Déjame en el suelo, cuéntame! Solo te dejare cuando es-
temos fuera del rebaño y te deje en tu lecho, solo allí te
contare. Vamos mi amor déjate de romanticismos lo que
sucede no es para… Shisss, no… digas nada mi joven
princesa y reina de mis sueños., no creo que tenga impor-
tancia donde empiece a contarte mi visión, ojala fuera la ul-
tima….
Mi amor cuanto me gustaría poder entrar aquí en tu mente,
poder ayudarte… poder ayudarte a luchar contra tu soledad,
tus visiones, despejar esa densa niebla que te envuelve, co
mo si fueras la cima de una montaña, de la montaña, se va
para volver, pero en tu mente se queda, sigue ahí siempre.
¡Onni, mi amor, me siento tan impotente… siempre recibie-
Ndo De ti. Arriesgaste tu vida, me salvaste. La primera vez
en aquel Hospital. Si no hubiera sido por ti mi final hubiera si
do trágico. Luego mi enfermedad de nuevo tu allí, no te imp-
orto arriesgar tu vida para salvarme, y yo aun no he podido
corresponderte. Pirkko mi cielo, ¡no digas eso!. Eres mi rega-
lo del cielo. Desde que te conocí no hay nada mas importan-
te para mi, tu y nuestra Giovanna. ¿no te olvidas de
nadie más? No, claro que no. Tengo aquí a mi pajarillo y allí
en el monasterio a mi princesa. Creo que no hay un hombre
en este mundo tan feliz. Oh mi amor, tú también eres mi re-
galo del cielo, tu y ellas, soís mi razón de vivir os amo a los
cuatro mas que a nada en el mundo.
-Creo que deberíamos intentar dormir un poco, aunque a mi
No me será fácil…. Después de!.. -Ven quiero tenerte en mi
regazo, como a Giovanna. Te contare ese cuento que le ha-
ce dormir.
¿Crees que conmigo dará resultado? No sé, con intentarlo
no perdemos nada... así mi amor, aquí, eso es mi niña chi-
quita. Oh Onni¡mi corazón! ¡qué bien!.
¿Es mi regazo mas blandito que tu lecho de hojas verdad?
Si pero hay algo por aquí que no esta tan blandito jejejeje…